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La “Sala Don Luis”
exhibe armas de fuego, armas blancas, armas
de pueblos originarios, colección de mates de plata, curiosidades
marinas. Dentro de las armas de fuego hay armas largas de distinto
tipo, como carabinas, fusiles, escopetas. También hay revólveres y
pistolas con distintos sistemas operativos, y de distintas épocas
históricas. Desde los viejos trabucos y pistolones de carga frontal,
hasta pistolas de la Primera y Segunda Guerra Mundial, pasando por
los raros revólveres lafouche, en diversos calibres. |
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La variedad de armas blancas
también es amplia: sables del Ejército Argentino, de la Marina de
Guerra, de la Policía Federal, de países vecinos, y hasta un sable
que se presume perteneció a Chacho Peñaloza. Bayonetas, facones,
puñales de diversas regiones del mundo. Incluyendo también cepos y
grilletes para prisioneros. Bastones con estoque, dagas árabes,
egipcias, y hasta un kriss malayo con la hoja envenenada.
En las armas de pueblos
originarios, apreciamos bolas de piedra utilizadas para las famosas
“boleadoras”, puntas de flecha y de lanza talladas en piedra, como
así también hachas del mismo material.
La pequeña colección de mates
de plata, da una pauta del arte que se ponía en la confección de los
mismos, y la importancia que dicha tradición tuvo en nuestras
tierras a lo largo de distintos períodos históricos.
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